Publicado por Aunque hay más demandantes de vivienda que viviendas en venta, para los propietarios no siempre es sencillo encontrar un comprador. Muchas veces, esto se debe a que la planificación de la venta no es la adecuada. Porque, como sucede con cualquier venta, para vender una casa también hay que tener una estrategia. Y es justo ahí donde el marketing inmobiliario entra en juego.
¿Marketing inmobiliario? Sí, igual que para vender cualquier producto, para la venta de inmuebles también hay estrategias que te ayudarán, no solo a vender una vivienda más rápido, sino a hacer la mejor venta posible.
Por eso, cuando hablamos de marketing inmobiliario hacemos referencia a las estrategias debidamente planificadas que se utilizan para vender una vivienda. Un trabajo que tiene beneficios como:
- Conocer a los clientes potenciales y, así, adaptar la oferta a sus intereses.
- Diferenciarse de la competencia y destacar por encima del resto.
- Medir el éxito de las ventas. El marketing es medible. Por lo tanto, puedes averiguar cuáles son las estrategias más efectivas y seguir mejorando en cada venta.
- Atraer clientes tanto para esa venta como para ventas futuras.
Pasos iniciales en una estrategia de marketing inmobiliario
Como veremos más adelante, existen diferentes estrategias de marketing inmobiliario. Cada una de ellas tiene sus ventajas propias y se adapta a situaciones diferentes. Pero, más allá de esto, hay una serie de pasos previos que es conveniente realizar. Gracias a ese trabajo previo podrás definir las acciones que vas a llevar a cabo y, también, optimizarlas al máximo.
- Analiza bien la propiedad. ¿Cuáles son los puntos fuertes de la vivienda? Es importante que des respuesta a esta preguntar para saber cuál va a ser el mensaje de tus acciones de marketing inmobiliario.
- Conoce a tu público objetivo mediante la definición de tu buyer persona. El concepto de buyer persona es como hablar del cliente ideal. Perfílalo a través de sus datos sociodemográficos, su nivel de ingresos, sus intereses, sus hábitos, etc.
- Define unos objetivos claros. No solo se trata de vender. Probablemente te hayas marcado un objetivo en forma de precio, plazos o, incluso, número de ventas. Fíjalos previamente y, sobre todo, ten en cuenta que deben ser claros, alcanzables y medibles.
- Establece una partida de presupuesto para acciones de marketing. Vender una vivienda también cuesta dinero. En el caso del marketing inmobiliario, para acotar las acciones que vas a realizar, también tienes que saber cuánto vas a gastar. Si haces las cuentas previamente, podrás repartir bien el presupuesto y optimizar esta inversión.
Las estrategias de marketing inmobiliario más utilizadas
Ahora que ya has empezado a recorrer el camino del marketing inmobiliario, es el momento de pensar acciones y estrategias concretas. Cinco de las que actualmente están más en boga son: el marketing de contenidos, la publicidad en buscadores, el posicionamiento SEO, el social selling y el email marketing.
Marketing de contenidos
El contenido es el rey y, si le preguntas a cualquier experto en marketing, seguro que está totalmente de acuerdo con esta afirmación. Crear contenido de valor para los potenciales compradores de una vivienda puede marcar la diferencia.
Un contenido que puede ofrecerse mediante blogs, en formato vídeo, infografías y mucho más. Sea como sea, piensa en el mensaje y objetivos que has definido previamente y cómo trasladar la información para que cale entre tus clientes potenciales.
Publicidad en buscadores
La inversión en publicidad es una de las opciones más recurrentes dentro del marketing en general, y del marketing inmobiliario en particular. Y, en este sentido, apostar por la publicidad en buscadores es una elección interesante: es más económica, pero eso no significa, ni mucho menos, que sea menos efectiva.
Google, que es el buscador más utilizado en nuestro país y en muchos otros, es una puerta de entrada para la gran mayoría de personas que quieren comprar o invertir en vivienda. Por eso, llegar a ellos desde el momento en el que van a comenzar su búsqueda y acompañarles durante todo el proceso te ayudará a posicionarte y convertirte en su primera opción.
Además, lo bueno de utilizar este tipo de publicidad es que podrás segmentar con mucho detalle el tipo de público al que quieres llegar. Algo que, no solo aumentará tus posibilidades de éxito, sino que te ayudará a no derrochar tu presupuesto.
Posicionamiento SEO
Para trabajar el posicionamiento en buscadores, además de la publicidad, es conveniente trazar una estrategia de SEO (Search Engine Optimization). Optimizar una web y posicionarla de manera orgánica también te ayudará a convertirte en una opción de referencia.
Dentro de este apartado puedes trabajar muchos aspectos: la propia web, las URL… pero, aparte de todo esto, disponer de un buen plan de contenidos te ayudará a alcanzar tus objetivos.
Social selling
Aquí es donde entran en juego las redes sociales. En plataformas como Facebook, Instagram o TikTok puedes crear una gran cantidad de contenido y enfocarlo de la forma que quieras.
Pero, el social selling lo que hace es enfocar las ventas de una forma menos intrusiva. Por ejemplo, a través de anuncios que se enmarcan en medio de contenido de calidad o de una segmentación adecuada.
Email marketing
Cada vez son más los que se lanzan al mundo del email marketing. Conectar con tus posibles clientes por correo electrónico es muy efectivo. Pero, para que esta estrategia funcione, es importante que cuides el mensaje, la frecuencia de envíos y la segmentación.
Además, tanto para la estrategia de emailing como para el uso de cualquier otra herramienta de marketing inmobiliario es conveniente que utilices la automatización. Básicamente, la automatización del marketing te da la oportunidad de estar de manera prácticamente ininterrumpida disponible para tus clientes potenciales, sea el momento que sea.
Todas estas estrategias, desde el marketing de contenidos al email marketing son muy útiles y recomendables. Pero, tampoco hay que olvidar aquellas herramientas que acompañan al marketing inmobiliario desde hace décadas y que son determinantes para triunfar: definir bien el precio, cuidar la imagen del inmueble o hacer publicidad offline.
